Cocinar el pollo: En una olla grande con abundante agua, coloca la pechuga de pollo junto con media cebolla, el diente de ajo, las hojas de albahaca y sal al gusto. Cocina a fuego medio hasta que el pollo esté completamente cocido y suave. Este caldo le dará un sabor especial a los siguientes ingredientes.
Enfriar y desmenuzar: Retira la pechuga del caldo y déjala enfriar lo suficiente para manipularla. Luego, desmenuza el pollo con las manos o con un tenedor en tiras delgadas o trozos pequeños. Reserva.
Cocinar las papas: Aprovecha el mismo caldo con sabor en el que cociste el pollo para cocer las papas, peladas y enteras. Una vez que estén tiernas, retíralas, déjalas enfriar un poco, pélalas y córtalas en cubos pequeños.
Preparar los vegetales: Lava bien la lechuga y córtala en tiras finas. Pica los tomates y los huevos cocidos en cuadritos. En un bowl grande, mezcla las papas cocidas, los huevos picados, el tomate, las arvejas cocidas y la lechuga.
Incorporar el pollo: Añade el pollo desmenuzado al bowl con los demás ingredientes. Mezcla todo cuidadosamente para que no se deshagan los ingredientes, manteniendo una textura agradable y equilibrada.
Preparar la vinagreta: En un recipiente pequeño, mezcla el aceite, el vinagre, sal y pimienta al gusto. Bate bien con una cucharilla hasta emulsionar. También puedes añadir una cucharadita de mayonesa si deseas una textura más cremosa.
Aliñar el salpicón: Vierte la vinagreta sobre la mezcla de pollo y verduras. Remueve suavemente hasta que todo esté bien impregnado. Prueba y ajusta la sal o la pimienta si es necesario.
Servir: Sirve frío, acompañado de una rodaja de limón o una salsa picante tipo llajwa, si te gusta con un toque más intenso. También puedes decorar con perejil fresco o una hojita de albahaca para darle un toque especial.